Manolete, si no sabes torear, pá que te metes», decía la famosa canción popular. Un ripio que le debe zumbar en los oídos al productor Andrés Vicente Gómez. Dos años después de anunciar a bombo y platillo Manolete, su ambicioso proyecto cinematográfico de 20 millones de euros sobre la vida del malogrado torero, aún no ha podido estrenarla. Los rumores (algunos confirmados) apuntan a que el verdadero motivo detrás de tanta moratoria es que el productor, sencillamente, no tiene dinero para terminarla.
Oficialmente, la publicitada película -encabezada estelarmente por el oscarizado Adrien Brody y Penélope Cruz- sigue en fase de postproducción por problemas con los efectos especiales: la mayoría de toros han sido digitalizados porque sus protagonistas, activos ecologistas, no quisieron rodar con animales de verdad. Pero los acreedores -al menos los que se atreven a hablar- afirman otra cosa muy distinta.
Al parecer, Andrés Vicente Gómez, hacedor de éxitos en los 90 como Jamón, jamón, El día de la bestia, Belle Epoque o las dos primeras partes de Torrente, ha vuelto a arruinarse, seis años después de que Telefónica evitara la quiebra de su productora, Lola Films, tapando un agujero de más de 11 millones de euros y posibilitando una ampliación de capital de más de 20.
Telefónica acabó abandonando el barco en 2004, pero Gómez -un gato con siete vidas- encontró a un nuevo salvador en El Pocero, quien le concedió un crédito sin intereses a cambio del patrocinio de la película por su compañía de vuelos privados.
Al principio, fue todo como la seda. La prensa siguió atentamente las sesiones de entrenamiento de Brody con Espartaco así como su romance con Elsa Pataky. Hasta que en la primavera pasada se produjo el primer retraso en la fecha de estreno. Nada raro en el cine español.
Las cosas adquirieron un tono más inquietante cuando a principios de otoño se volvió a posponer el estreno -fijado ahora para una fecha indeterminada de 2008-. Fue entonces cuando José Luis Moya, director de Construcciones Escénicas Moya, empresa con impecable reputación, decidió romper el pacto de silencio implícito que impera en el sector y acusó públicamente y en los tribunales a Andrés Vicente Gómez de adeudarle casi un millón de euros.
Según Moya, los pagarés del productor le son devueltos; según Gómez, el problema es que la empresa quiere cobrarle un precio superior a lo acordado. Lo cierto es que la Justicia, de momento, se ha pronunciado a favor de Moya. Las dos sentencias a las que ha tenido acceso Crónica embargan preventivamente los derechos de explotación de otra película de Gómez, Io Don Giovanni, aún sin estrenar para saldar la deuda con Moya. «Es indignante porque además esta película ha recibido muchas subvenciones públicas, es indignante pensar qué habrá hecho este señor con el dinero de todos», dice a Crónica el agraviado. Moya no sólo esgrime las dos sentencias condenatorias (de las siete demandas interpuestas), sino que también se refiere a los problemas del productor con la Seguridad Social, hechos que desveló el diario Información de Alicante, ciudad donde se rodó Manolete. El pasado 24 de julio, la Tesorería General de la Seguridad Social, desde la Dirección General de Trabajo, le reclamó 4.508,65 euros en concepto de cuotas impagadas. El 8 de agosto, fue la Unidad de Recaudación Ejecutiva (URE) número 28/01 de Madrid la que dictó un expediente de subasta pública de bienes inmuebles embargados, publicada en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid el 24 de agosto. Y el 27 de marzo, se le embargó una finca situada en Borox (Toledo) tasada en 999.453 euros. Finalmente, el pasado 25 de septiembre la Dirección General de Madrid de la Seguridad Social notificaba el embargo de las cuentas corrientes y de ahorro de Lola Films Internacional.
Andrés Vicente Gómez reconoce, eso sí, «problemas de tesorería» sin entrar en detalles y afirma que el asunto está «resuelto o en fase de negociación» aunque no lo demuestra. Según Moya, él no es el único proveedor al que ha dejado de pagar Gómez. Requerido por Crónica, Moya se puso en contacto con algunos de los damnificados para solicitarle su participación en el reportaje, pero al parecer todos han declinado la invitación: «Este señor sigue teniendo un considerable poder dentro del mundo del cine», dicen. Sí lo ha hecho el hotel Melià Alicante. Fuentes de la dirección afirman que una sentencia ha embargado los futuros ingresos por taquilla de Manolete hasta que se cubran los más de 120.000 euros a que asciende la factura pendiente de cobro.
Para Gómez, de 64 años, pareja de la periodista Concha García Campoy, el hombre que encarnó la figura del productor exitoso y carismático a la americana, no se trata, quizá, más que de otro episodio en su tormentosa carrera. Ya podía notarse su nerviosismo cuando, a principios de 2007, logró estrenar Teresa, el Cuerpo de Cristo, biopic sobre la poetisa del siglo XVI dirigido por Ray Loriga, cuya producción ya tuvo numerosos retrasos y parones. La película podría haber sacado a su productora de dificultades (algunas personas del mundo del cine comunicaron a Crónica que, de hecho, Lola Films ya no existe aunque una visita a su sede de la calle General Pardiñas permite comprobar que, cuanto menos, sigue allí), pero Teresa costó 12 millones de euros y su recaudación apenas superó los 600.000.
Apodado durante años «el capo», Imanol Arias confesó en sus memorias -Imanol Arias. Con los pies en la tierra- que estuvo cuatro años sin trabajar porque él lo vetó. Un boicot que también sufrió Juanjo Puigcorbé. De momento, a Gómez quizá sólo le quede rezar para que sus proyectos triunfen. El 30 de noviembre se estrena uno de ellos, Canciones de amor en Lolita's Club, de Vicente Aranda. Y en 2008, también queda pendiente el Io, Don Giovanni, de Carlos Saura. Aunque será la suerte de Manolete la que decida el porvenir de ese equilibrista llamado Andrés Vicente Gómez.
ELMUNDO.ES/CRONICAL a película «Manolete», protagonizada por el estadounidense Adrien Brody y la española Penélope Cruz, y rodada en gran parte en Ciudad de la Luz y localizaciones de la provincia de Alicante, sigue sin llegar a los cines, mientras que su principal productor atraviesa algunos problemas económicos y judiciales. Esta superproducción de Andrés Vicente Gómez contó con un presupuesto superior a los 20 millones de euros, comenzó su rodaje en abril del pasado año y, pese al tiempo transcurrido y a la expectación que ha generado, todavía no tiene fecha prevista para su estreno.
Mientras que en la página web de la productora Lolafilms, propiedad de Andrés Vicente Gómez, figura que la cinta sobre el mítico torero se encuentra todavía en fase de postproducción, diversas publicaciones especializadas anunciaron en los últimos meses su llegada a las salas para el 23 de noviembre, después de múltiples aplazamientos. Sin embargo, tampoco será ese día, según aseguraron ayer fuentes de la productora, que no se atreven a fijar fecha. Sí lo hace el responsable de Trivisión y coproductor valenciano de la cinta, Ximo Pérez, que señaló ayer a INFORMACION, después de que el pasado julio confirmara que iba a ser en noviembre, que ahora «se espera que pueda ser estrenada a principios de 2008».
Nuevo retraso Pérez niega que este nuevo retraso, que puede imposibilitar que la cinta opte a los próximos Premios Goya, se deba a los problemas económicos de Andrés Vicente Gómez y lo atribuyó a «temas de montaje y de efectos especiales, que están siendo muy complicados».
El productor de Lolafims tiene abierto un conflicto desde principios de año con Construcciones Escénicas Moya, compañía que se encargó de la creación de los decorados y con la que ha trabajado anteriormente en otras películas.
Cabe recordar que esta firma madrileña fue, junto a Panavisión, la primera fichada por Aguamarga Gestión de Estudios S.L. para prestar sus servicios en Ciudad de la Luz y convertirse así en «un elemento diferencial de su oferta».
Según indicó ayer a este diario el gerente de la citada empresa, José Luis Moya, la productora de «Manolete» les adeuda «casi un millón de euros, por lo que tenemos presentadas siete demandas». La primera vista judicial se celebrará precisamente hoy en Madrid, informó Moya. No es el único problema que acucia a Andrés Vicente Gómez, uno de los productores más prolíficos y de más éxito en España y que ya ha rodado varias películas en los estudios alicantinos de Ciudad de la Luz. Según consta en el Registro Mercantil, su productora Iberoamericana Films Producciones S.A., a través de la que financió «Manolete», ha sufrido tres reclamaciones administrativas recientes, dos de ellas de embargo.
La primera se produjo el pasado 24 de julio, cuando la Tesorería General de la Seguridad Social, desde la Dirección General de Trabajo, le reclamó 4.508,65 euros en concepto de cuotas impagadas.
El día 8 de agosto, también de este año, la Unidad de Recaudación Ejecutiva (URE) número 28/01 de Madrid dictó un expediente de subasta pública de bienes inmuebles embargados a Iberoamericana Films que salió publicado en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid del 24 de agosto. En esta diligencia se notifica la valoración de estos bienes «hallándose el deudor en paradero desconocido». A raíz de sus deudas con la Seguridad Social se procedió, con fecha del 27 de marzo de 2007, al embargo de una finca de su titularidad situada en el término municipal de Borox (Toledo). Al deudor se le informaba de que el inmueble había sido tasado, a efectos de su posible venta en subasta pública, si no realizaba el pago de la deuda, en la cantidad de 999.543 euros. A día de hoy no hay constancia de que se haya saldado la citada deuda. La tercera y más reciente, del pasado 25 de septiembre, es de la Dirección General de Madrid de la Seguridad Social, y en ella se notifica el embargo de las cuentas corrientes y ahorro de Lolafilms Internacional S.L.
Ximo Pérez reconoció que «hay problemas de pagos», algo que considera «normal y natural en películas de este presupuesto», máxime cuando «el rodaje se prolongó cinco semanas más y el coste se disparó un 25% más de lo previsto».
Según ha podido saber este diario, se dieron más casos de afectados por impago por parte de la producción de «Manolete», entre ellos el hotel Meliá de Alicante, donde se alojaron miembros del equipo de rodaje. Pérez precisó que se han presentado pagarés a todas las personas y mercantiles a las que se les adeuda dinero. «Son típicos problemas de financiación», añadió, al tiempo que aseguró que «Andrés Vicente Gómez nunca en la vida ha dejado de pagar a nadie».
DIARIOINFORMACION.ES
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