Mercedes Miá nerviosa ante el estreno de GH 12.

Dediqué una entrada a Mercedes Milá hace unos días. Era algo que quería hacer desde hace tiempo y me había frenado absurdamente en algunas ocasiones. Alguien creerá que lo hago para asegurarme la próxima entrevista, pensé entonces. Pero ella me la ha concedido siempre.
Vísperas de la octava edición fue la primera, larga y plagada de preguntas farragosas. Hoy, cuatro años después, he aprendido que lo bueno si breve dos veces bueno. Y que mejor no preguntar nada relacionado con la edición en ciernes, a pesar de que me odiarán por ello muchos de nuestros lectores. Preguntas como las que siguen podría hacerle, por tanto, en cualquier otro momento. Y sí, querida Mercedes, tendré que arreglarme con nuestros amigos lectores cuando vean que te pregunto sobre el deporte o la alimentación. En realidad estaba expresando mi inquietud ante los meses (quizá más meses que otros años, ya se verá) que nos esperan. Un poco de deporte y una buena alimentación no me vendrían mal para compensar tantas horas sentado viendo lo que sucede en Guadalix. A decir verdad, no me cansaría nunca de preguntar sin parar.
En un encuentro digital de un diario leí estas palabras de Milá: “GH es el formato más novedoso, inteligente y creativo de la televisión de los últimos 20 años. Es un programa honesto, técnicamente innovador y muy bien realizado. Imprevisible, como la mejor televisión”. Uno lleva años intentando explicar lo que es este programa. Esforzado en defender el formato y encontrar los mejores argumentos acompañados de las palabras más adecuadas. Cuando leí aquello me di cuenta de mi infinita torpeza. En solo tres frases lo había retratado con precisión de relojero. Ahí está la explicación de por qué me gusta escuchar con atención sus palabras.
Pregunta: ¿Qué sientes más en estos días previos al estreno de una nueva edición de Gran Hermano: emoción, tensión, ilusión o esperanza?
Respuesta: Voy a escoger dos: ilusión y esperanza. Ilusión porque vuelve a ser posible empezar un programa que me hace ser feliz durante el tiempo que dura y, por encima de eso, porque sé que lo espera suficiente gente como para que nuestro trabajo merezca la pena. También porque me la contagian mis compañeros en todos los mails que nos escribimos estos días. Digo mails, Gato, porque hasta mañana miércoles no me sentaré con ellos a hablar de GH 12, aunque nadie se lo crea. Esperanza, una palabra básica cuando has apostado y esperas que te salgan las cosas como deseas. Esperanza en que mis compañeras del casting hayan acertado; en que vivamos historias; en que nada se vea venir; en que entre gente dispuesta a dejarse ver, a compartir, a vivir sin tapujos ni planes. Esperanza a pasarme horas escuchando la vida de Guadalix, lo que hablan, lo que piensan -eso también se escucha si se mira con atención-, lo que se va construyendo en esa casa transparente. La emoción y la tensión las dejo para el domingo cuando los concursantes entren por la puerta.
Pregunta: En tus comienzos televisivos hiciste periodismo deportivo, ¿crees que los concursantes de Gran Hermano deberían imitar algunos valores de los deportistas?
Respuesta: En esos años aprendí mucho de los deportistas. Hasta entonces ni los tenía en cuenta; a mí me interesaba la política. Cuando llevaba un tiempo haciendo deportes en televisión, cambiaron mis esquemas y varié mis opiniones. Los deportistas buenos, los que consiguen lo que todos se proponen y sólo algunos logran, son constantes, ambiciosos, rigurosos, pacientes, inteligentes, estrategas, difícilmente generosos, pero siempre saben reconocer a quién deben batir. Aprendí que no hay nada como observar atentamente y no dar nunca nada por perdido. Eso sumado a un trabajo minucioso y capacidad de sacrificarse, suele dar sus frutos. A mí me parece que si un concursante de GH hace algo de eso, tiene mucho ganado.
Pregunta: Este año esperamos verte sin un brazo ni una rodilla rota. Mi abuelo decía que el deporte solo da tullidos. Seguro que no estás de acuerdo con esto. ¿Qué deportes practicas con frecuencia?
Respuesta: Menos mal que estoy sobre madera… Este año llego al programa sin averías, ¡al menos hasta hoy! Tu abuelo y yo discutiríamos por culpa de esa afirmación que no comparto. El deporte da felicidad, produce endorfinas (que como todos sabemos son las hormonas de la felicidad). El deporte de alta competición puede acarrear problemas si se abusa del cuerpo, que antes o después protestará. El deporte que practicamos gente como yo, lo único que trae es salud física y mental. Sin hacerlo, sin subirme en la bici, sin andar por el monte, sin darle caña al cuerpo, no sé vivir. Tu abuelo y yo me temo que no nos pondríamos de acuerdo…
Pregunta: Te he escuchado y leído hablar muchas veces de la sana dieta mediterránea. Dame las claves básicas de una alimentación saludable.
Respuesta: Gato ¿tú crees que los lectores de tu blog van a aceptar esto como una entrevista previa a GH 12? Yo te contesto encantada pero luego tú te arreglas con ellos. Hay que aprender a comer. En el colegio deberían enseñarnos a comer antes que a nada más. Comer bien es vivir bien. Desayunar fruta, pan integral con aceite y algo de jamón o queso o huevo y la bebida que se quiera. Tomar algo a media mañana, unos frutos secos, un plátano, una manzana. En la comida hidratos: pasta, arroz, quinoa, verduras y vegetales. A media tarde un yogur o unas galletas y para cenar proteínas. Pescado, pollo, pavo, cordero, cerdo, carne (la que cada uno elija), también acompañado de alguna verdura. Si a todo esto le añades acordarte de que hay agua para beber, estás cuidando tu cuerpo y gastando la menor energía para hacer las digestiones. Además, no te costará mantener un peso suficiente para no cabrearte cada mañana al ponerte los pantalones.
Pregunta: ¿Perjudica más a Gran Hermano la actitud de algunos concursantes tras su expulsión (emprendiendo una absurda venganza contra el propio programa, frustrados por su paso escasamente exitoso) o la crítica poco razonada de los espectadores contrarios al formato? (del papel desempeñado por algunos de los llamados ‘programas satélites’ mejor ni hablamos).
Respuesta: Lo que observo que hace más daño al programa es el comportamiento de algunos concursantes cuando salen de la casa. Sea por la razón que sea se convierten en auténticos enemigos del formato que han dicho amar tanto. Sus enfrentamientos, sus peleas, sus falsos enfrentamientos y falsas peleas, que de todo hay, nos colocan a todos en el mismo cesto y nos hacen mucho daño. Sé que hay concursantes que se han visto forzados por los propios programas a entrar en esas guerras pero también los hay que han entrado solitos por ganar un dinero que les parecía una bicoca.
Pregunta: ¿Algún concursante te ha sacado de tus casillas?
Respuesta: Sí, pero intento disimular. Aunque, lo reconozco, no siempre lo consigo.
Pregunta: Te he visto preguntar muchas veces a un concursante recién salido de la casa sobre lo que había aprendido en su paso por el programa. Ahora pregunto yo, si me lo permites: ¿Qué has aprendido gracias a presentar Gran Hermano?
Respuesta: Muuuuuuuchas cosas. De entrada, en el primer GH aprendí a trabajar con un guión que había escrito otro. Eso, que parece una tontería, era un gran dificultad para mí que siempre me escribía de cabo a rabo todo lo que salía por mi boca. Tuve que pararme a pensar si merecía la pena discutir por una frase o por una idea; intentar entender por dónde iba ese redactor cuando decía las cosas como las decía; respetar los tiempos que ellos marcaban… en fin, tuve que domarme mucho. Ese fue el primero y resultó muy provechoso porque trajo otra cosa añadida: la paciencia. Aunque no me crea nadie, GH me ha enseñado a ser más paciente de lo que siempre fui. Ya entrando en la convivencia de la casa y de la mano de los concursantes, me he visto tantas veces reflejada en comportamientos que no me gustaban, que he tratado de cambiarlos aunque todos sabemos que cambiar es muy difícil. He aprendido a interpretar miradas, gestos, silencios. He aprendido a descubrir al egoísta, al que va de bueno y esconde maldad, he aprendido a ser menos egoísta, a ver la “vigaza” en mi ojo cuando critico la “pajilla” en el ajeno. En fin, Gato, cualquiera puede aprender miles de cosas en este programa porque todos nos parecemos mucho y a poco que te fijes, te ves retratada y desde luego ¡no siempre para bien!
Pregunta: Este fin de semana vi a Bea, ‘la legionaria’, en una verbena de Madrid. Fue una manera de calibrar bien su fama. Decenas de personas se le acercaban e incluso vi a adolescentes emocionados por poder hacerse una foto con ella. En alguna ocasión has hablado de “socializar la fama” (idea muy interesante, a mi juicio), es decir, ayudar desinteresadamente con la propia imagen siempre y cuando la causa lo merezca. Es algo que haces a menudo. ¿Crees que también lo deberían hacer más los concursantes de Gran Hermano?
Respuesta: Muchos lo hacen. Creo que si no lo hacen más es porque: o no se les ocurre, o no se lo proponen. Tengo que decir en defensa de todos los concursantes, que siempre que les he pedido algo a cambio de nada para ayudar a una causa, han acudido en masa. Pero ya que me hablas de Bea y del revuelo que se forma a su alrededor, me gustaría reflexionar sobre lo difícil que tiene que ser digerir esa fama enorme cuando te viene de sopetón y nadie te ha preparado para ello. Lo digo porque eso ayudaría a entender muchas de las tonterías que a menudo les acusamos de hacer o decir.
Pregunta: ¿Qué pasará con la siguiente edición? la cual debería llevar el guarismo de la mala suerte. ¿La llamarán doce más uno? No te imagino presentando un GH 13.
Respuesta: No sé de lo que me hablas.
Pregunta: ¡Cáspita! Estooo… Si los aficionados al programa nos enfrentáramos a la desgracia de no tener el canal 24 horas en ninguna plataforma de televisión (parece ya casi seguro que no irá en Digital +, donde si hubo canal de Gran Hermano las últimas temporadas), ¿te comprometes a defender nuestra causa allí donde te fuera posible?
Respuesta: Las 24 horas son la esencia de Gran Hermano. Todos mis jefes saben que sin esa opción, la audiencia del programa será menor. Como comprenderás doy por hecho que estarán preparándonos la sorpresa de cuál va a ser el canal que nos acompañará todas las horas del día dentro de la casa de Guadalix; otra cosa no me cabe en la cabeza. De todos modos, si se vuelven locos y hay que luchar para conseguirlo, dentro de mis fuerzas que son mucho más pequeñas de lo que la gente cree, haré lo que haga falta para lograrlo y me uniré a vuestra/nuestra causa.
Pregunta: Ahora que el Grupo PRISA y Telecinco tienen una relación especialmente buena e incluso hacen negocios juntos, ¿crees que es más posible un Premio Ondas para Gran Hermano?
Respuesta: A mí ya se me ha pasado la ilusión. Durante años esperé cada noviembre el premio Ondas para nuestro programa; ahora, si se lo dieran ni siquiera lo recogería. Es demasiado tarde.
Pregunta: Dijiste hace años en una entrevista que no habías hecho periodismo escrito porque no sabes escribir. Tras casi tres años escribiendo en el bolo supongo que podrás rectificar aquella afirmación.
Respuesta: Jamás agradeceré suficiente a Ana Bueno, la directora de la web de Telecinco, que me ofreciera e insistiera tanto en que escribiera un blog. Lo hice porque me aseguró que valía todo: una frase, una foto, una palabra, un pequeño párrafo. Ella es la responsable de que hoy pueda reflejar por escrito algo que pienso o me pasa. Ese tesoro no tiene precio y ha cambiado mucho mi vida. Ya no puedo decir que no sé escribir aunque si debo decir que me queda un mundo por aprender a hacerlo bien. Lo que sí siento es la felicidad de poder expresarme por escrito y sentir que hay un grupo de gente que lee y comenta. Esas personas me dan la vida.
Pregunta: Gracias por tener, un año más, la deferencia para con nuestros lectores de conceder esta entrevista previa al estreno de una edición de Gran Hermano. Repito lo dicho hace unos días: es una suerte que vuelvas a ser alma máter del programa.
Respuesta: Gato, es de justicia que te cuente algo: mi madre quiere que le imprima tu comentario en papel para poder releerlo todas las veces que quiera y enseñárselo a cualquiera que pase por su vida. Nunca antes lo había hecho y me emociona. Me emociona casi tanto como me emocioné cuando lo leí yo. No basta con decir gracias, hará falta que pase el tiempo y, poco a poco, te demuestre que me hiciste mucho bien. Aquí os dejo a todos mi abrazo de cada año y mi compromiso de dejarme la piel de nuevo en este GH12 que está a punto de comenzar. En estos momentos tengo muy presentes a los concursantes que aún no conozco pero que sé que estarán pasando días de muchos nervios e ilusión. Espero que lo pasemos todos más que bien y que nos duela cuando vaya llegando ese final que no nos gusta nada. Gracias por ser fieles, ser tantos y estar siempre con nosotros.
¿Qué os dije? Ha sido un honor tener la exclusiva de esta entrevista, primera que concede Milá antes del estreno este mismo domingo de la duodécima edición de Gran Hermano. Para hablar más del programa tendré que plantearme un cambio en lo que para mí es otra tradición y hacer la entrevista tras finalizar la edición en lugar de previa a su comienzo.
Sobre lo que nos espera el domingo veo multiplicarse los rumores con una mezcla de incredulidad y sorna. Algunos sé que son falsos sin ni siquiera preguntarlo. Otros me parecen tan verosímiles como intrascendentes. Me alegro de haber hecho esta entrevista antes del día de hoy, porque tras ese encuentro con su equipo que nos ha anunciado Mercedes me hubiera sido difícil no intentar obtener alguna pista. Por mi parte puedo tirarme a la piscina haciendo unas pocas predicciones. Vamos a ello.
El próximo domingo empieza una edición más superlativa que inesperada. El lema en cuestión, del que hablé sobradamente en la última entrada de este blog, tiene más de mercadotecnia televisiva que de otra cosa, como suele ser. Hablo de una edición superlativa porque puede que la casa sea más grande de lo acostumbrado (quizá sea el momento de dejar descansar el juego de varias casas para volver a una sola), quizá también porque vayamos a encontrarnos con más concursantes que otras veces. Y, ya lo dije antes, tal vez estemos ante una edición larga, lo cual no es tan nuevo porque ya lo fue la del año pasado, aún más si le añadimos ‘El reencuentro’. Pero estas no son otra cosa que suposiciones mías, algunas de las cuales puede que tardemos algún tiempo en corroborar.
[Seguimos intentando conocer tus recuerdos de GH. ¡No dejes de participar! Y hasta el día 29 de este mes se podrán seguir recibiendo bocetos de jóvenes diseñadores de moda dispuestos a vestir a Mercedes Milá en las galas].

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